Artemisia annua es una planta herbácea aromática originaria de Asia, una especie que destaca del resto de su género como una fuente excelente e importante de compuestos terapéuticos clínicamente probados. Artemisia annua L. produce una gama de terpenoides complejos en sus tricomas, entre los cuales la artemisinina es de especial interés para el tratamiento de una variedad de patologías.
Usos en la antigüedad
Para algunos el nombre artemisia deriva de la diosa griega de la caza y los bosques Artemisa que según la tradición fue la primera en probarla y descubrir sus virtudes. Mientras que para otros la denominación proviene de la palabra griega “artemes” que significa «de buena salud». Era considerada una hierba mágica, se creía que era útil para mantener alejados a los espíritus negativos. Artemisia es un género de plantas conocidas desde la antigüedad por sus diferentes y numerosas propiedades curativas, pero es en China que estas especies se vuelven particularmente conocidas y reconocidas por sus diversas propiedades para la salud. Esta se usaba tradicionalmente para tratar la fiebre. Siendo redescubierta en 1970 cuando se encontró el Manual Chino de Prescripciones para Tratamientos de Emergencia (340 a. C.).
Usos terapéuticos
Sus propiedades medicinales fueron redescubiertas por la ciencia moderna en la década de 1970 cuando la investigación reveló que la planta contiene más de 10 sustancias activas que actúan juntas o en paralelo. En 1971, los científicos demostraron que los extractos de la planta tenían actividad antimalárica en modelos de primates, y en 1972, el ingrediente activo, la artemisinina, fue aislado y su estructura química descrita. Las sustancias terapéuticas contenidas en la planta son artemisinina, eupatorina, casticina, artemetina, ácidos fenólicos y cumarinas. La artemisinina es su componente principal y se encuentra en los tricomas glandulares de las hojas, tallos e inflorescencias. Se concentra sobre todo en las partes superiores de la planta donde se produce el nuevo crecimiento.
Usos modernos
En general, la artemisia es una planta con un efecto sedante y expectorante y también tiene propiedades antisépticas, antiespasmódicas, carminativas y digestivas, emenagogas, expectorantes y antidiabéticas. Los estudios científicos han demostrado que los componentes dentro de las hojas de Artemisia annua, que se pueden ingerir en cápsulas, extractos o tés, tienen una actividad significativa contra el cáncer de mama y próstata sin efectos secundarios graves. Artemisia annua, ha demostrado ser eficaz también contra una amplia gama de cánceres de mascotas y leishmaniosis. La prevención, como se suele decir, es incluso mejor que una cura. Artemisia annua y derivados están siendo estudiados para efectos preventivos. Cuando se toma en las dosis recomendadas no da efectos secundarios y podría incluso proteger eficazmente contra el desarrollo de enfermedades, de infecciones a los cánceres.
Artennua®, versión estandarizada de Artemisia annua
Artennua® es la versión estandarizada de la planta Artemisia annua; gracias a nuestra tecnología 100% natural que aumenta el contenido de principios activos botánicos.
La producción de Artennua® se basa en una tecnología única y patentada llamada TricoStimulant™, una solución agrotécnica inteligente 100% natural en forma de bioestimulante dirigida a mejorar específicamente las plantas medicinales y aromáticas.
El mecanismo de acción de la tecnología TricoStimulant™ se basa en estimular los tricomas de las plantas (estructuras glandulares) para que produzcan más moléculas de interés. Tras muchos años de I+D, la tecnología se ha incorporado al cultivo de la planta Artemisia annua y ha creado una nueva marca de una versión estandarizada de la planta bajo la marca Artennua®.
Artennua® es, por tanto, el resultado de la aplicación de la tecnología única Tricostimulant™ a las plantas en el campo, durante el ciclo de floración. Hoy en día la mayor producción se origina en una finca ecológica en las Islas Canarias.